miércoles

ESPERANDO A DON BOSCO



Ya se acerca este 4 de mayo, cuando veremos entrar la Urna que contiene a Aquel que dedicó toda su vida, "hasta su último aliento" para salvar a la juventud, sin discriminación alguna.
Son sus reliquias las que llegan hasta nosotros, como diciéndonos: "No puedo ir corporalmente, pero de corazón estoy con ustedes, en parte de lo que perteneció a mí! Animo, sigan luchando que "los espero a todos en el paraíso!"
Las voces se alzan, las manos aplauden y los pañuelos blancos ondean anunciando el júbilo que brota de cada corazón al sentir cerca (como ayer Madre Mazzarello) a Don Bosco, que nos trae la santidad ya que "él es un santo, yo lo siento (dijo la santa)."
Ya ha llegado la programación y todos los detalles a cada uno de los responsables e interesados en este magno acontecimiento. Todo se ha organizado con lujo de detalles desde la misma salida de Italia hasta los pormenores en cada provincia salesiana en Colombia.
La realidad está por verse cuando veamos la multitud que recibe al Padre y Maestro de los jóvenes que llegan allí donde sus hijos llegaron 14 años después de su partida al Paraíso; a Barranquilla.
Nos imaginamos a Don Bosco frente a este templo que construyeron con gran sacrificio aquellos Salesianos de la Primera hora y que dejaron como herencia no solamente a los Salesianos que vendrían después sino a todos aquellos que quisieran entregar su ser por la misión que llevó a Don Bosco a darlo todo.